El CETIM se felicita de la decisión de la jueza británica Vanessa Baraitser, la cual consideró que el estado de salud de Julian Assange, actualmente encarcelado en Londres, es incompatible con la demanda de extradición a los Estados Unidos. Es un ejemplo de respeto del derecho a la salud, tema que el CETIM defiende desde hace años.
Además, hace ya 5 años, el CETIM y la AIJD demandaron al Consejo de Derechos Humanos que invitara al Reino Unido a respetar la autoridad del Grupo de Trabajo de las Naciones Unidas sobre la Detención Arbitraria y así cumplir con la demanda de este mismo Grupo de Trabajo quien pidió que se asegurara la integridad física y mental del fundador de WikiLeaks, así como su derecho a la libertad de movimiento.
Por otra parte, el CETIM lamenta la reciente decisión del tribunal británico que rechazó la liberación de Julian Assange. También deplora que, al denegar la solicitud de extradición a los Estados Unidos, la jueza haya rechazado los argumentos relativos al derecho a la información y a la libertad de expresión, así como la prohibición de la extradición por motivos políticos, practica sin embargo internacionalmente reconocida. A este respecto, el Relator Especial de las Naciones Unidas sobre la Tortura, Nils Melzer, dijo que le “preocupa seriamente que la sentencia confirme la muy peligrosa justificación que subyace en la acusación de los Estados Unidos, lo que de hecho criminaliza el trabajo del periodismo sobre la base de la seguridad nacional”.
Como declaró el Relator Especial en otro comunicado de prensa, “las pruebas son abrumadoras y claras, el Sr. Assange ha estado deliberadamente expuesto durante varios años a formas progresivamente graves de tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, cuyos efectos acumulados sólo pueden describirse como tortura psicológica”.
El Relator Especial solicitó entonces a las autoridades británicas de liberar inmediatamente a Julian Assange de la prisión. El CETIM reitera su llamamiento a la liberación inmediata e incondicional del fundador de WikiLeaks, el cual fue atacado por su actividad de periodista de investigación con el fin de informar a la población sobre los crímenes de un gobierno.
Suiza debe cumplir inmediatamente con la solicitud de las autoridades de Ginebra de otorgarle un visado humanitario a Julian Assange con carácter urgente. Se cumplen las condiciones establecidas por el Consejo Federal, según las cuales “la expedición de un permiso humanitario presupone que una autoridad cantonal ha declarado previamente su voluntad de conceder un permiso de residencia sobre esta base”, para que Assange sea acogido en Ginebra.